REFLEJOS DESDE AQUEL LAGO

Ávila. Copyright foto:Teresa Morales.
Cuando le pregunté a Jetsunma Tenzin Palmo si podía ser mi maestra, me contestó, amablemente, que no. No aceptaba discípulos, pues su misión en la vida era otra. Sin embargo, a medida que transcurre el tiempo, sus enseñanzas y cercanía, la que siempre ha tenido conmigo de una forma más privada, y la que alimenta de manera más general con sus conferencias, charlas y libros, han conseguido crear el camino por el que, no solo encuentro sabiduría, sino también consuelo y silencio para seguir entendiendo esto que yo llamo trascender. Hoy, mientras las cigüeñas sobrevolaban El Soto con sus picos repletos de nuevos cimientos para sus nidos, y mientras el sol bañaba con su calor el suelo embarrado y húmedo, leía el interesantísimo y muy recomendable libro Reflejos en un lago del Himalaya (ediciones Dharma). Su contenido son las conferencias que Jetsunma Tenzin Palmo ofreció en Estados Unidos y Australia en los años 1996, 1997 y 1998. Ahora, desde este 2017 recién comenzado, esa década nos puede parecer antigua y muy lejana, sin embargo, sus palabras son actuales e inspiradoras, como lo siguen siendo los sermones que Buda impartió hace más de 2.500 años. Recojo aquí un párrafo para que sirva de recurso a quienes buscan, como yo, un método para volver al presente y permanecer en él. Sin los atropellos del ansia por un futuro customizado a nuestros antojos, ni las rémoras de un pasado que a veces se vuelve ganador y boicoteador. "Estamos estresados, porque siempre estamos mirando algo en la distancia. Si siempre estás mirando la cima de la montaña que estás escalando, no puedes ser consciente del pasto o de las flores que crecen a tus pies. Siempre estamos mirando hacia adelante. ¿No es verdad? Y entonces las cosas reales, la vida misma, se nos escapan. Estamos encerrados en nuestros cerebros, aislados del presente, siempre centrados en algo más allá de nuestro alcance. Nos imaginamos esa ilusión de felicidad, de satisfacción y de realización que aparecerá de manera mágica cuando algo suceda. Pero lo que sucede en este momento es "esto" y es el único "esto" que tenemos, lo demás son construcciones. Si perdemos el momento por pensar en otra cosa, lo perdemos para siempre. Sabed simplemente lo que sucede justo en ese momento. Eso es suficiente. Este momento pasará al siguiente momento y luego se transformará en el siguiente, no es nada espectacular. No es luz, música y dicha, pero va a transformar vuestras vidas".
Un placer leerte, Tenzin Palmo, y sentir toda esa calma con la que demuestras que sí es posible vivir y ser conscientes del estado de la existencia dentro de la propia vida.